¿Cómo puedo hacer que mi perro esté cómodo usando un arnés?

  Habrá muchas cosas para enseñar a tu perro durante su tiempo juntos. Andar con collar tradicional o collar arnés es una de ellas. Si eliges un arnés en lugar de un collar, ayudar a tu perro a sentirse cómodo con él será otra parte del entrenamiento.

  Si te sientes abrumado con la idea de entrenar con el arnés, echa un vistazo a la pequeña guía a continuación. Abordaremos algunas recomendaciones sobre cómo hacer que tu perro esté cómodo usando un arnés.

 

Elige el arnés correcto

 

  Si estás tratando de hacer que tu perro se sienta cómodo con un arnés, necesitas tener un arnés que sea realmente cómodo. Parte de lo que hace difícil el entrenamiento con el arnés es la incomodidad que su perro siente al usar un arnés de baja calidad. Su perro no querrá usar nada que le pique o que no le quede bien, así que un arnés cómodo es obligatorio.

  Como collares arneses disponibles en Mundo Animalito están hechos con la comodidad en mente. Vienen en una variedad de tamaños y tienen varios puntos de ajuste para que se ajusten perfectamente siempre.

 

Presenta a tu perro el arnés

 

  Al intentar acostumbrar a un perro al arnés, es mejor no sobrecargar a tu amigo de cuatro patas. No apresures el entrenamiento forzando a tu perro a usar un arnés inmediatamente. Déjalo oler, luego coloca el arnés en el suelo y deja que el perro se acerque. Si el perro se queda tranquilo, intenta poner el arnés en la espalda de tu perro sin sujetarlo.

Cuando un animal tiene tiempo para acostumbrarse a un nuevo objeto, él o ella se vuelve menos propenso a asustarse cuando ese objeto está sobre o cerca de él.

 

Descubre cómo atar a tu perro

 

  Si te complicas con el arnés de tu perro la primera vez que se lo pongas, puede causar estrés, siendo innecesario para él. Algunos arneses son más complicados de poner que otros, así que intenta trabajar con un arnés. fácil de poner y quitar.

  Lee las instrucciones que acompañan el arnés de tu perro. Practica ponerlo y quitarlo de una almohada, cojín o peluche. Después de saber cómo usar el arnés, puedes intentar ponérselo a tu perro.

  Ve despacio al poner el arnés a tu perro y trata de hacer del proceso un juego. Habla con tu mascota con una voz tranquila y actúa como si ponerle el arnés fuera algo divertido.

 

Prueba el arnés antes de una caminata 

 

  Cuando logres ponerle el arnés a tu perro, dale tiempo para que se acostumbre a usarlo. Recompense al perro con una golosina tan pronto como el arnés esté puesto y luego deje que el animal camine por la casa.

  Tan pronto como el perro se sienta cómodo usando el arnés por la casa, puedes sujetar la correa. Intenta hacer una caminata corta. Comienza a pasear con el perro con el arnés durante unos minutos a la vez. Puedes aumentar lentamente el tiempo de caminata si el perro está manejando bien eso.

  Recuerda elogiar al perro cuando termine la caminata y le quites el arnés.

 

Recompense el buen comportamiento

 

  Los perros aprenden mejor cuando son recompensados por hacer lo que se les pide. Si deseas que tu perro se comporte al usar un arnés, recompénsalo cuando haga lo que le pidas. Si tu perro se sienta o se queda quieto y te deja ponerle el arnés, dale un premio. Si tu perro camina con el arnés sin tirar o aullar, dale un premio. Si tu perro facilita la retirada del arnés, dale un premio.

  Recompensas y elogios ayudan a entrenar a un perro para realizar las tareas que se le solicitan. Al trabajar con su mascota y elogiar su buen trabajo, el entrenamiento del arnés puede volverse mucho más fácil. Antes de que te des cuenta, tu perro verá el uso de un arnés como una invitación a una aventura contigo en su próxima caminata.

  Un arnés es ideal por varias razones. La leve compresión puede ayudar a que su perro se sienta seguro durante las caminatas. Un arnés facilita el control de su mascota durante los paseos. Por último, si tu perro tiende a resbalar o tirar con suficiente fuerza para ahogarse, un arnés acabará con esos problemas.

  Continúa con tu entrenamiento de arnés. El tiempo y el esfuerzo que dediques al entrenamiento de tu perro valdrán la pena cuando esté totalmente entrenado.